Tenía pensado cerrar el curso con una entrada sobre la Escuela Miguel de Guzmán, pero este tweet se ha cruzado en mis planes.
Lo único que había visto hasta ahora de Shanghai era sus excelentes resultados en las pruebas de siempre. No parece que sea sencillo conseguir información. No he encontrado su currículo en inglés, y los textos que usan allí tampoco están en inglés. Parece que este tema ha surgido por el proyecto de implantar estas metodologías en colegios (de primaria) de Gran Bretaña. Aquí hay algo de información sobre Shanghai, y algunos materiales de muestra (de los primeros cursos de primaria).
En este otro enlace de Maths no Problem se puede leer una comparativa sobre Singapur y Shanghai. Creo que debo avisar de que es una comparativa interesada: Maths no Problem es la editorial británica que empezó a trabajar con Marshall Cavendish, la editorial más importante de Singapur. Recientemente Marshall Cavendish se ha aliado con Oxford University Press (aquí) y creo que Maths no Problem está trabajando con otra editorial de Singapur. En cualquier caso (y aunque mi opinión también puede estar sesgada, desde luego), creo que tienen bastante razón en lo que dicen. La fortaleza esencial de Shanghai puede ser la excelente preparación de su profesorado, mientras que la metodología de Singapur puede depender menos de la excelencia del docente (eso no quiere decir que lo ideal no sea tener buenos docentes, claro, en este espacio no creo que haya que hablar de una función de varias variables).
Lo que sí es cierto sobre Singapur, y esto lo he repetido muchas veces en las últimas semanas, presentando los libros de Polygon Education en los colegios de la zona de Madrid, es que la metodología de Singapur se hizo famosa, a nivel internacional, por su éxito en el movimiento homeschooling de EEUU. ¿La razón? Creo que sencilla: los padres descubrieron que «esas matemáticas» sí las entendían. Y también es cierto que en Singapur eligieron la metodología teniendo bien presente que sus docentes de hace 30 años tenían una formación más bien tirando a básica. Las cosas han cambiado, desde luego (por ejemplo, los profes de Singapur tienen 100 horas de formación continua obligatoria al año. Vamos, 6 veces más que aquí en cantidad. Y apuesto a que en calidad también nos aventajan) pero creo que algo de esa idea de «facilidad de presentación» todavía subsiste.
Termino con una especulación: el lector atento se puede haber dado cuenta de que detrás de los materiales de Shanghai que enlacé arriba está Collins, otra de las grandes editoriales británicas. Es posible que la razón de que aparezca Shanghai sea simplemente que es la forma que Collins ha encontrado de unirse al movimiento de renovación en Gran Bretaña, porque allí el gobierno ha puesto mucho dinero en este tema.
Por lo que viene en el artículo tampoco parece que el método Shanghai sea muy innovador. Repetir conceptos, cantarlos en voz alta (eso suena mucho a las tablas de multiplicar cuando algunos eramos pequeños). El profesor es la estrella de la clase …
Lo que si es diferente es la formación del profesorado, profesorado especializado, cinco años mínimo de formación, el número de horas dedicadas a la docencia al día, horas dedicadas a la evaluación entre pares, OBSERVAR LAS CLASES DE OTROS, …
Ya tenemos para debatir, aunque es verano
Me gsutaría que tu entrada sobre la Escuela Miguel de Guzmán no se pediese y que la publiques, aunque sea la primera del curso que viene.
En princpio no parece muy innovador: clases magistrales, repetición de conceptos en voz alta (recuerda a las tablas de multiplicar que nos hacían repetir de pequeños), nula atención a la diversidad, …
Pero luego hay una parte muy interesante, profesionales con formación específica en matemáticas, cinco años mínimo (diferencia sustancial), dos horas de clase magistral al día (¡DOS HORAS!), horas de evaluación entre iguales, OBSERVACIÓN DIRECTA DE LAS CLASES DE OTROS.
En fin que tenemos para debatir.
Por cierto, ¿nos tenemos que perder tu entrada sobre la Escuela Miguel de Guzmán?
Muchas gracias por el interés 🙂 Habrá entrada sobre la Miguel de Guzmán antes de agosto, sí.
¿Alguien sabe cuántos alumnos hay por aula allí? Yo tengo a 30 en 1° de ESO (muy muy muy variopintos, desde chicos que no saben las tablas de multiplicar hasta otros que razonan problemas complejos) y me gustaría saber hasta qué punto influye esto en las metodologías de Shangai y Singapur.
En una entrada de 2012 enlazaba al ministro de educación de Singapur hablando del tema del tamaño de los grupos. Ese enlace ya no funciona, veré si puedo arreglarlo.
Sí recuerdo haber leído que hace unos años los grupos en Singapur eran grandes, por encima de 40 alumnos. Seguro que la cosa ha mejorado estos últimos años, porque están gastando mucho dinero en educación.
Y me creo perfectamente, desde luego, que un grupo de 40 alumnos de allí pueda ser más fácil de manejar que uno de 25 de aquí …
Bueno, pues ya está arreglado el enlace a la pregunta que le hicieron al ministro de educación de Singapur sobre el tema. Ha sido suficiente con escribir un correo a Singapur, mencionando el tema. Me han contestado en menos de una semana, con el enlace actualizado …
Aquí está el enlace a mi entrada: https://masideas-menoscuentas.com/2012/12/12/timss-2011-y-2/